El último viaje del Endeavor

La emoción en el rostro de los niños. La ilusión en los ojos de la humanidad. La esperanza palpitante en sus corazones; pero, los más sabios y viejos miran con cautela, con recelo, con miedo.

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Hace mucho que navegamos por inercia, sin rumbo fijo, sin destino.

El «Endeavor» se construyó para ser más que una simple estación científica, es una colonia, una nave interestelar en el más pleno sentido; como sacada de una antigua película de ciencia ficción; funcional, autosustentable y de energía ilimitada. ¿Para qué? Sólo por curiosidad; al igual que los antiguos navegantes y exploradores de la Filipinas, que se aventuraban al mar solo para ver qué había más allá. Y aquí estamos, sin un destino prefijado, sin una misión de colonización, solo vivir en el espacio, viajar entre las estrellas recabando conocimientos, midiendo y tal vez, con la esperanza de encontrar algo más.

Mi nombre es Elira comandante en turno de la bahía de navegación, soy quinta generación nacida en el espacio, ajena a la tierra a la que ya nadie llama hogar; nuestro hogar está aquí, entre las estrellas.

 —Envío del informe diario exitoso comandante.

—Gracias alférez, descanse, le llamaré si se le necesita.

«¿Por qué seguimos enviando datos?, ¿acaso aún hay alguien que los reciba? »

Las mediciones con las que partimos de la Tierra hace tanto eran erróneas, la galaxia es más grande de lo que se estimaba y esas estrellas de sus mapas, muchas ya no están; tragadas por agujeros negros o extintas hace mucho.

Nuestra velocidad es constante, medimos y programamos el curso con antelación cada día. Eso lo aprendieron mis abuelos a la mala, confiados en las mediciones de los terrestres casi son absorbidos por un agujero negro que no detectaron a tiempo. Aquí el conocimiento traído de la Tierra es inútil, aquí todo es diferente, el tiempo, el frío, la soledad.

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«Almirante Elira al puente de mando».

«Almirante Elira al puente de mando».

He vivido más que la expectativa promedio, sigo siendo almirante aunque mi bisnieta ya es capitán. Como he dicho, el tiempo aquí es diferente, la primera generación vivió en promedio unos 90 años y a partir de allí la longevidad ha aumentado.

—¿Cuál es el problema comandante Asia?  

—Está frente a usted.

«¡Nada! ¡Por primera vez, nada!»

El espacio siempre está lleno de ondas electromagnéticas, flujos de gravedad, asteroides, estrellas, planetas y tantas otras variables como la materia negra… pero, ahora… ¡simplemente no hay nada!

—¡Mapa en pantalla; muestrenme las coordenadas! 

«Las mediciones estaban mal. No se qué me sorprende.»

—Parece que hemos llegado al límite de la galaxia. ¡¿Cómo es que no se dieron cuenta antes capitán?!

—Ayer el curso era factible almirante.  Parece que el borde se mueve a una velocidad 300% mayor que la del resto.

—Navegante, ¿cuánto tiempo para corregir el curso?

—No el suficiente, almirante. Una modificación abrupta generará daños catastróficos.

—Capitán Asia, algo se mueve al frente.

—¿Algo, cómo que algo?

—¡Almirante los controles se desestabilizan! 

—Curso trazado vuelve a ser viable.

—¿¡Cómo es eso posible!?

«¿Qué está pasando aquí? »

—¡Impacto con onda de origen desconocido en treinta segundos!

—Almirante, el trayecto trazado es fluctuante, aparece y desaparece.

—Almirante, Capitán… Si seguimos por el curso trazado…

—¿Qué pasa, a dónde nos lleva?

—Al parecer…

—… a otra Galaxia.

—Abuela… mira, es Andrómeda… Perderemos contacto con la tierra si proseguimos,  pero, si cambiamos de curso, el hábitat tal vez no resista. 

—Si perdemos el hábitat seremos un féretro flotante en cuestión de días. 

«Estamos frente a otra galaxia. ¿Arriesgar todo el hábitat para no perder contacto con la tierra?» 

—¡Tiempo límite para cambiar el curso: 15 segundos!

«La tierra… es el centro de comando, pero ya para nadie aquí representa otra cosa que un cuento para dormir. Es hora de tener una misión, de tener un hogar».

— Tiempo límite: 10 segundos.

— Transmisión de mensaje de  emergencia, ¡ahora¡

»»“Esta es la almirante Elira de la nave de exploración Endeavor. Última transmisión.
Población: (…).
Activos en servicio: (…).
Estado de la nave: óptimo.
Curso: punto de enlace con la Galaxia Andrómeda.
Posibilidades de retorno inciertas. Envío coordenadas y últimos datos recabados.
Impacto con onda desconocida proveniente de la galaxia, inminente.

—Impacto en 3… 2… 1…

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Al parecer, las leyes universales realmente lo son. La física, las matemáticas, funcionan igual en esta galaxia y lo más curioso es que hay una posibilidad de poder descender en un planeta.

«Almirante, al puente»
«Almirante, al puente»

«La vista es hermosa»

Un azul indescriptible. Un brillo como una joya en el universo.

—Lecturas de humedad, presión, temperatura y oxígeno óptimas.

—¿Algún rastro de vida pensante?

—Negativo Almirante; al parecer, solo vegetación. No hay radiaciones térmicas correspondientes a ningún tipo de vida animal.

—Sonda Liberty ingresando a la nave. Datos en pantalla en 5 minutos.

«¿Será posible que podamos llamar a esa joya hogar?»

—Los datos de la sonda confirman condiciones óptimas para la vida.

El planeta es, en pocas palabras, una tierra virgen. En los próximos meses comenzaremos el descenso y exploración. La nave quedará en órbita como una estación espacial.

Una búsqueda exhaustiva ha revelado que el planeta no tiene un solo organismo animal vivo, no hay insectos ni animales; las aguas incluso son prístinas, sin bacterias. ¿Acaso tenemos derecho de cuidar tan inmaculado lugar?

La nave puede seguir viajando indefinidamente, pero nosotros no elegimos subir ella, esos fueron nuestros antepasados, a nosotros no nos dieron opción. Ahora podemos elegir… elegiremos descender y no cometer los errores que llevaron a la tierra a lanzar a un porcentaje de su población humana, vegetal y animal al espacio.

Este es el primer día de nuestra historia. El año uno de la tripulación del Endeavor en casa, en suelo firme,  en Tierra-Andrómeda.

«Debería tener un mejor nombre.»




“Paradis” – Año 1


Relato creado para los “52 retos de escritura LiterUp” bajo la premisa:

Inventa un cuento que suceda en las estrellas

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